La justicia tarda pero llega. Hoy lunes 18 de diciembre un nuevo caso de justicia se escribe en el Perú despúes de 25 años. Todos los integrantes del grupo paramilitar Grupo Colina, incluyendo a Montesinos, Nicolás Hermoza Rios y el cómplice de la FAP Yataco Lavalle recibieron sentencia condenatoria por el caso del joven Santiago Gómez Palomino, desaparecido en julio de 1992.
La entidad que impuso la sentencia fue la Segunda Sala Penal Liquidadora. Una victoria después de 25 años de lucha legal, del cual estuvo a cargo la Asociación Pro Derechos Humanos.
Como se recuerda, Santiago Gomez Palomino, joven a quien el Grupo Colina apodó “El evangelista”, vivía en Chorrillos y fue detenido y desaparecido este grupo paramilitar en julio del 1992. Santiago Martín Rivas, entonces Jefe del Grupo Colina y Mayor en retiro del EP, gritó en la sala penal “Soy inocente”, pero fue en vano pues sus propios coprocesados ya habían confesado el crimen.
El cuerpo del joven desaparecido habia sido encontrado entre las Playa la Chira y La Herradura en el año 2012 a tan solo dos kilómetros de su casa en Chorrillos.
