Se iniciaron diligencias en distintos lugares de Huanta – Ayacucho

El 28 de septiembre, se iniciaron una serie de intervenciones antropológicas forenses en distintos lugares de Huanta, para registrar, ubicar sitios de entierro y hacer posible la recuperación de los restos de personas desaparecidas en el año 1984.

La primera Fiscalía Supraprovincial Especializada de DD.HH. de Ayacucho, en coordinación con la Dirección General de Búsqueda de Desaparecidos, dispuso la intervención de varios lugares donde se presume la existencia de sitios de entierro o fosas clandestinas del periodo de la violencia política, con la finalidad de ubicar el paradero de más de 80 personas que habrían sido detenidas e ingresadas al cuartel de la Marina ubicada en el estadio municipal de Huanta y donde habrían sido torturadas, asesinadas y desaparecidas.

La fiscalía ha informado que se ha abierto una carpeta de investigación denominada “Estadio de Huanta” para dar respuesta al derecho de las familias de las víctimas, entre ellos del caso Pucayacu, Jaime Ayala, Culluchaka, detenidos de Huanta 84, entre otros, cuyas denuncias acompaña APRODEH. Los familiares vienen exigiendo una respuesta más activa e inmediata de las autoridades judiciales y del estado sobre la ubicación de sus seres queridos, evitando que se pierda o destruya evidencias o sitios de entierro como en el caso de los restos de Pucayacu y otros, además de la demora prolongada que conlleva la identificación de los mismos.

Mientras se despejó el sombrío panorama post electoral, la diligencia de recuperación de restos en la zona de Rashuillka, Huanta, tuvo resultados importantes con el hallazgo de una fosa y la recuperación de varios cuerpos. Las Fiscalía de DD.HH. junto a la Dirección Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas y APRODEH vinieron coordinando a fin de seguir interviniendo en la dicha zona.

El 6 y 7 de octubre, continuó la segunda etapa de intervención arqueológica forense para ubicar restos, esta vez en el sector de Patasucro. La Marina de Guerra tenía una pequeña base, donde fueron detenidas muchas personas, principalmente campesinos de las zonas altoandinas. La fiscalía también se constituyó en el sector de Iribamba. En ambos lugares se presumía la existencia de posibles sitios de entierro. Lamentablemente, estas diligencias no tuvieron resultados.

Desde la zona de Rashuillka, varios cuerpos fueron recuperados y trasladados hasta los laboratorios del Equipo Forense Especializado para su estudio respectivo e identificación, representando una etapa más para la cual los familiares deben esperar. De otro lado, existe la preocupación de las familias buscadoras a fin que se cautele estos puntos donde existe restos por recuperar.

Los familiares lograron que la Fiscalía y la Dirección General de Búsqueda de Personas Desaparecidas programen la continuación de diligencias en 4 puntos de la zona altoandina de Rashuillka entre el 18 y el 21 de octubre, para evitar la pérdida o el deterioro por los factores climáticos y otros. Junto a ellos, dos grupos de peritos forenses se formaron para avanzar con más eficiencia. 

En dos de los puntos que fueron nuevamente investigados, se encontraron restos óseos. El punto 2 presentó restos de dientes humanos, prendas de vestir, zapatos, municiones, cables de posibles mechas de objetos detonantes. Se observa el sitio de entierro debajo de una roca grande en presencia de lodo tierra negra arcillosa que dificulta recuperar  los restos que en este caso, estaban en estado deteriorado, destrozados en fragmentos pequeños indicando una fosa múltiple ósea posible restos de varias personas como hombres y mujeres. Los resultados de los análisis de laboratorio determinarán cuántos  fueron.

El día 19 se continuó en los puntos 4 y 5. En la zona 4, no se ubicó nada a parte de una fosa  circular con piedras rellenadas al escarbar. En el punto 5, se ubicaron dos fosas cercanas al otro debajo de rocas de piedra gigante con restos óseos, prendas de vestir, presencia de casquillos de bala, igual se observaron cables de mechas de objetos detonantes, similar a la modalidad de punto 2 mencionado previamente.

La presente diligencia ha sido muy complicada por lejanía, altura y condiciones climáticas. Sin embargo, los familiares  con fuerza y esperanza, cada vez más preparados logísticamente y cumpliendo con el respeto a la Pachamama y al Apu, ayudaron a los obreros haciendo carpas de plástico para continuar la excavación.

Reconocemos el arduo trabajo que supuso esta diligencia, el compromiso de la Fiscalía, los peritos Equipo Forense Especializado del MP y el acompañamiento de la DNBPD que hizo posible la presencia de los familiares, por cuya razón y derecho se configura esta nueva perspectiva de dar a estas acciones un rostro humanitario. APRODEH, a través de la asistencia integral sigue acompañando a los familiares y vigilando esta tarea.

Cualquier información adicional pueden escribirnos por este medio o al teléfono: +51 964 810 369

 

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